La Escola Tenis Mataró organiza un torneo de tenis para homenajear a quién fue alumna suya y consigue recaudar 13.000 euros para la investigación del cáncer infantil.
Georgina, una paciente de 16 años que hace pocos meses nos dejó al no poder superar un cáncer, era una gran apasionada del tenis. Por eso, no puede haber mejor homenaje que el que le organizó la Escola Tenis Mataró: un torneo infantil de tenis con su nombre. Además, a través de este deporte que tanto amaba, se han conseguido recaudar 13.000 euros para poder continuar investigando esta enfermedad, que cada año afecta a centenares de niños y niñas como ella. El Primer Trofeo Georgina de Miguel Antoja, que se celebró durante cinco días en las instalaciones del Club de Tenis Mataró, fue todo un éxito, con la participación de 150 jugadores de todas las categorías, que disputaron más de 200 partidos. Seguramente, el secreto de este éxito fue la ilusión que puso todo el mundo, motivados por el recuerdo a Georgina. Su familia, que impulsó el torneo a través de la Asociación contra el cáncer infantil Georgina de Miguel Antoja, mostraron su agradecimiento por esta respuesta tan positiva, en un acto que fue muy emotivo para todos ellos. El torneo contó con la presencia de destacados jugadores de tenis, como Albert Ramos, Tommy Robredo, Carla Suàrez, Albert Costa y Jordi Arrese. También se sumaron otros deportistas de élite, que cedieron algunos objetos para hacer una subasta solidaria, entre los que destacan una raqueta firmada por Rafa Nadal y una camiseta de Leo Messi. Los cinco días de competición se cerraron con una jornada lúdica, en la que asistieron un millar de personas, que pudieron disfrutar de varias actividades y de la actuación castellera de los Capgrossos de Mataró, que emocionó a los asistentes. En este acto final también hubo unas palabras de la doctora Ofelia Cruz, directora clínica del Servicio de Oncología del Hospital Sant Joan de Déu Barcelona, que recordó la importancia de las donaciones para avanzar en la investigación del cáncer infantil. La lucha de Georgina continúa a través de las personas que la quieren, esta vez para ayudar a los niños y niñas que sufren o sufrirán cáncer. Su recuerdo se ha convertido en un aliento ilusionante para muchas familias.